Todo empezó hablando del pueblo en el taller, de lo bonito que es, de los monumentos, de Fray Tomás, del lagarto... y nos dijimos "¿Por qué no vamos a ver la colegiata todos juntos?". Algunos de los acompañantes de los usuarios del taller no la conocían y la nueva tallerista tampoco, ¡la excusa perfecta!
Uno de los familiares se encargó de programarlo todo, y estuvimos siguiendo la visita guiada con muchísimo interés e ilusión. La capilla de Santa Ana, el coro, el órgano, la tumba de Fray Tomás entre otras maravillas de esta joya del siglo XVI y como no, el lagarto traído por Fray Tomás desde Panamá.
Después de la visita, y unas fotos de grupo en la plaza, nos dimos un paseito hasta el aula donde damos los talleres, y estuvimos recordando juntos todo lo que habíamos visto: los pilares tan altos con forma de palmeras, el Cristo de Ébano, los objetos que habían pertenecido a Fray Tomás, las tumbas de la gente rica, de los más pobres... en fin, ¡nos dió para charlar de la excursión en varias sesiones! y ahora, con la foto de grupo ¡hemos fabricado un cuadro precioso!
No hay comentarios:
Publicar un comentario